Los nitratos causan la bacteria de hierro y esto a su vez generan metales pesados o químicos dañinos que pueden estar presentes en el agua contaminada por bacterias de hierro o sistemas afectados incluyen:
1. Metales pesados
Los siguientes metales pueden aparecer en el agua potable debido a la corrosión de tuberías o a la contaminación del suelo y las fuentes subterráneas:
a) Plomo (Pb):
- Fuente: Corrosión de tuberías antiguas de plomo o soldaduras de plomería.
- Efectos en la salud:
- Afecta el desarrollo neurológico en niños.
- Puede causar daño renal, hipertensión y problemas cardiovasculares en adultos.
b) Manganeso (Mn):
- Fuente: Presente naturalmente en el agua subterránea, puede liberarse con la corrosión.
- Efectos en la salud:
- En niveles altos, afecta el sistema nervioso y puede causar síntomas similares al Parkinson.
- En bebés, puede interferir con el desarrollo cognitivo.
c) Cobre (Cu):
- Fuente: Corrosión de tuberías de cobre.
- Efectos en la salud:
- Puede causar molestias gastrointestinales, como vómitos o diarrea.
- A largo plazo, puede dañar el hígado y los riñones.
d) Cadmio (Cd):
- Fuente: Filtración de residuos industriales o pesticidas.
- Efectos en la salud:
- Daña los riñones.
- Está relacionado con enfermedades óseas y ciertos tipos de cáncer.
e) Arsénico (As):
- Fuente: Puede filtrarse desde depósitos naturales en el suelo o por actividades industriales.
- Efectos en la salud:
- Causa cáncer de piel, vejiga, pulmones y riñones.
- Puede provocar daño al sistema nervioso y cardiovascular.
2. Otros químicos dañinos
Además de los metales pesados, el agua contaminada puede contener compuestos químicos asociados con el uso agrícola, industrial o la descomposición de materia orgánica.
a) Nitratos y nitritos:
- Fuente: Fertilizantes, filtraciones de sistemas sépticos.
- Efectos en la salud:
- Causa methemoglobinemia (síndrome del bebé azul) en lactantes.
- Aumenta el riesgo de cáncer gástrico en adultos.
b) Sulfuros (H2S):
- Fuente: Actividad bacteriana y descomposición de materia orgánica en pozos.
- Efectos en la salud:
- Olor desagradable (huevo podrido).
- En niveles altos, puede causar irritación en las vías respiratorias.
c) Mercurio (Hg):
- Fuente: Filtración de residuos industriales o minería.
- Efectos en la salud:
- Daña el sistema nervioso y los riñones.
- Altamente tóxico, incluso en pequeñas cantidades.
d) Pesticidas y herbicidas:
- Fuente: Filtración agrícola en áreas con cultivos.
- Efectos en la salud:
- Relacionados con trastornos hormonales, daño al sistema nervioso y ciertos tipos de cáncer.
e) Cloroformo (trihalometanos – THMs):
- Fuente: Subproducto del cloro utilizado para desinfectar el agua.
- Efectos en la salud:
- Puede ser carcinogénico en exposiciones prolongadas.
Cómo estos contaminantes se relacionan con bacterias de hierro
- Liberación por corrosión:
- Las bacterias de hierro, al corroer las tuberías, pueden liberar metales pesados como plomo, cobre o manganeso.
- Refugio para otros contaminantes:
- Las biopelículas formadas por bacterias de hierro pueden atrapar y proteger a bacterias patógenas, metales pesados o compuestos químicos, dificultando su eliminación.
- Agravan la química del agua:
- Los altos niveles de nitratos o sulfuros pueden interactuar con metales ya presentes, aumentando su solubilidad y liberación en el agua potable.
Cómo protegerse de estos contaminantes
- Pruebas regulares del agua:
- Analiza los niveles de metales pesados y contaminantes químicos anualmente.
- Filtración específica:
- Sistemas de ósmosis inversa para eliminar metales pesados.
- Filtros de carbón activado para compuestos orgánicos como pesticidas.
- Inspección de tuberías:
- Sustituye tuberías viejas, especialmente las de plomo o cobre corroídas.
- Mantenimiento del pozo:
- Limpia y desinfecta el pozo regularmente para eliminar bacterias de hierro y sedimentos.
Conclusión
El agua contaminada por bacterias de hierro puede actuar como un vector para la liberación de metales pesados (como plomo, manganeso o cobre) y químicos dañinos (como nitratos o pesticidas). Aunque las bacterias de hierro en sí no son peligrosas, sus efectos indirectos pueden afectar tanto la calidad del agua como la salud humana. Tratar el agua con sistemas adecuados y realizar pruebas regulares son pasos esenciales para garantizar su seguridad.